Camilo un hombre de pueblo y para su pueblo

Camilo simplemente Camilo, así comenzó su vida después el devenir histórico y su actuar lo bautizarían con epítetos como el Señor de la Vanguardia, el Héroe de Yaguajay, el compañero de cien batallas, el hombre de confianza de Fidel, el legendario comandante.
Verdadero revolucionario, expedicionario, hombre de pueblo, estratega militar, dirigente carismático, leal sin límites, jocoso y humano, así era él; de ahí que Cuba lo reconozca como héroe genuino que luchó hasta el límite de sus fuerzas por ver libre a su sufrida Patria.
Amasaba el internacionalismo como un principio inherente a todo revolucionario, defendía a ultranza la dignidad y soberanía de todos los pueblos.
La fe inquebrantable lo acompañaron siempre, hasta en los momentos más difíciles siempre se escucharon sus órdenes guerreras.
Pródigo en virtudes este guerrillero mereció los elogios del Che, quien lo consideró un gran amigo.
Hoy, 28 de octubre, su sonrisa amplia e inolvidable llega hasta cada cubano y se funde con sus heroicas hazañas que lo mantienen vivo, a pesar de que la muerte se interpuso en su camino, se esparce un mar de flores para tributarle el más merecido amor.
La incondicionalidad y legado se mantendrán por siempre grabados en la historia Patria, por ser un hombre de pueblo y porque a este se debió todo.